Del 24 de junio al 18 de septiembre.
Sala de exposiciones temporales del Centro de Interpretación de la Arquitectura Popular.-

La sala de exposiciones temporales del Centro de Interpretación de la Arquitectura Popular de Dos Torres acoge la exposición "Córdoba eterna: savia y sabiduría" hasta el 18 de septiembre. Una excelente colección de pinturas concebida como una mirada singular hacia esa ciudad a orillas del Guadalquivir, cuna de  grandes creadores y pensadores a lo largo de la historia: Séneca, Al Gafequi, Maimónides, Góngora, Castilla del Pino, Julio Romero de Torres, Mateo Inurria, Ginés Liébana, Duque de Rivas, Fosforito, Manolete, …

Gaditano de San Roque, Andrés Vázquez de Sola (1927) siempre tuvo en el activismo político de izquierdas su complemento a la actividad artística, incluso durante su exilio en París durante el franquismo. Allí alcanzó fama como colaborador del popular semanario satírico ‘Le Canard Enchainé’ y, posteriormente, en los periódicos Le Monde, Le Monde Diplomatique y L’Humanité.

Considerado maestro de viñetistas y del periodismo gráfico, Vázquez de Sola comenzó su trayectoria profesional en el diario Patria de Granada. Militante del Partido Comunista desde 1951, su ideología le costó padecer la censura, además de despidos y deportaciones. Primero se vio obligado a abandonar el diario Madrid y posteriormente Televisión Española, donde participaba en el programa ‘Sábado Noche’ dibujando caricaturas de los participantes.

En 1959 Vázquez de Sola decidió huir de España. Tras unos duros inicios en la capital francesa en los que durmió bajo los puentes del Sena y trabajó como peón de albañil, la publicación del dibujo La Gran Corrida Franquista en Le Canard Enchainé obtuvo un gran eco y le sirvió para alcanzar la estabilidad profesional. Una vez consolidado como dibujante satírico y político, comenzó también a explorar su faceta de pintor con lienzos al óleo.

Durante su estancia en Francia se hizo amigo de grandes intelectuales como Gabriel García Márquez, Blas de Otero o Picasso. Volvió a España el 21 de noviembre de 1975 y poco a poco se fue alejando de las viñetas y se centró en su faceta como pintor y escritor, en la que sigue inmerso.