Seis procesiones recorren las calles de Dos Torres, en una Semana Santa que, procesionalmente, se adelanta dos días.

Seis procesiones recorren las calles de Dos Torres, en una Semana Santa que, procesionalmente, se adelanta dos días y que por orden cronológico son:

VIERNES DE DOLORES

Nuestra Señora de los Dolores. Inicia su recorrido a las 22:30 horas en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, regresando, aproximadamente, a las 00:30 de la madrugada. Más de un centenar de hermanas, que visten traje y velo negros, acompañan al paso. La Virgen de los Dolores, en los días de Semana Santa, siempre acompañó al Nazareno, al Cristo de la Caridad y al Santo Entierro.

DOMINGO DE RAMOS

Procesión de las Palmas. Sale  de la ermita de San Roque a las 11:30 de la mañana, tras la bendición de las palmas y los ramos y finaliza en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción a las 12:15 horas. Los asistentes portan palmas o ramos de olivo.

MARTES SANTO

Nuestro Padre Jesús Nazareno. Sale de la iglesia a las 22:30 horas y regresa alrededor de la 1 de la madrugada. Más de un centenar de nazarenos de riguroso morado en túnica y capirote y más de cien hermanas, que visten, indistintamente, como los nazarenos o bien de negro con peina de teja y mantilla o velo, participan en el desfile procesional.

MIÉRCOLES SANTO

Nuestro Padre Jesús de la Caridad. Sale de la ermita del Santo Cristo a las 22:30 horas y finaliza en la parroquia alrededor de la 1 de la madrugada. Más de un centenar de hermanos con túnica y capirote negros y capa blanca y más de cien hermanas de riguroso negro, con peina de teja y mantilla o velo, acompañan a sus patronos.

VIERNES SANTO

Hermandad del Santo Entierro. Tres pasos. Sale de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción a las once de la noche y regresa a la misma alrededor de la una y media de la madrugada. Más de un centenar de hermanos y hermanas con túnica y capirote negros y capa y fajín de color burdeos, y alrededor de 150 jóvenes hermanas de María Magdalena, que visten traje negro y velo negro de tela con una cruz amarilla y sudario blanco, participan en su estación de penitencia.

SÁBADO SANTO

Cristo Resucitado y Nuestra Señora de la Salud. El Cristo Resucitado sale de la parroquia de la villa tras la Vigilia Pascual  y la Virgen de la Salud de la ermita del Santo Cristo. Tras el entrañable y emotivo encuentro de la Madre con el Hijo se inicia la procesión que concluirá en la plaza, donde regresan alrededor de las 00:30 horas, entre cánticos de júbilo que festejan la Resurrección del Señor.

 

Uno de los principales objetivos que persiguen con perseverancia, los componentes de cada una de las cofradías y hermandades que configuran el paisaje piadoso de nuestra Semana Santa, en sus respectivas estaciones de penitencia es, sin lugar a dudas, el silencio. Y, ciertamente, lo consiguen. Las diferentes procesiones de Dos Torres son verdaderas estaciones de penitencia. El silencio se adueña de los desfiles procesionales. Un silencio sobrecogedor, sempiterno, infinito. Se pueden oír los pasos de los penitentes que desfilan en cada una de las procesiones. Un silencio que sólo se rompe cuando las notas musicales de la Banda de Cornetas y Tambores y de la Agrupación Musical, ambas de Dos Torres, irrumpen en la serena melancolía y en la apacible mansedumbre de la noche. Armonía de colores, brillos de metales y redobles de tambores, para acompañar al rey sin trono terrenal. Cristo aparece en todo su esplendor, rodeado de luz, incienso, flores y, sobre todo, por las miradas. Ese silencio absoluto, impresionante y misterioso es el símbolo y la esencia que define la grandiosidad y dimensión espiritual de la Semana Mayor de Dos Torres, impregnando los diferentes desfiles procesionales de un misterio muy singular.